Orla de notables
Abundio Javierre
Abundio Javierre Santatecla nació en Tafalla (Navarra) el 28/08/1909 y vino a fallecer, atropellado por un tractor, en Tauste (Zaragoza) el 13/06/1982 justo cuando se iniciaba el Mundial de Fútbol al que tanto lustre dio Naranjito.
Criado en el seno de una familia profundamente religiosa y tradicionalista, tuvo ocasión de leer muchas de las aplomadas obras de Sabino Arana y en ellas fundamentó su férrea y carcundiosa formación. Su díscola personalidad le granjeó dos amenazas de expulsión del Seminario Mayor de San Clorato donde egresó como sacerdote jesuíta. "Falta de espiritualidad", alegó el padre Flamarique que actuó de inculpador eclesiástico en la causa.
Rezaba poco y elucubraba mucho. Su buena mano para la ingeniería diocesana, dio al mundo grandes y provechosos inventos tales como los Baturros Pisauvas que aún hoy recorren ferias y fiestas de España, la Virgen Patriota que, desde su posición yacente, ejecuta el saludo fascista o el Autómata Paquito, una réplica del Caudillo que jamás llegó a utilizarse.
Dejó escritos más de doce volúmenes en los que se detallaban innumerables inventos que, con el tiempo y la desfachatez de muchos, han ido e irán saliendo a la luz para hacer la vida humana mucho más fácil y la del fiel cristiano más prolífica en oración.
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| Abundio Javierre (I) con el obispo Ginés Prolapsillo (D) |
Criado en el seno de una familia profundamente religiosa y tradicionalista, tuvo ocasión de leer muchas de las aplomadas obras de Sabino Arana y en ellas fundamentó su férrea y carcundiosa formación. Su díscola personalidad le granjeó dos amenazas de expulsión del Seminario Mayor de San Clorato donde egresó como sacerdote jesuíta. "Falta de espiritualidad", alegó el padre Flamarique que actuó de inculpador eclesiástico en la causa.
Rezaba poco y elucubraba mucho. Su buena mano para la ingeniería diocesana, dio al mundo grandes y provechosos inventos tales como los Baturros Pisauvas que aún hoy recorren ferias y fiestas de España, la Virgen Patriota que, desde su posición yacente, ejecuta el saludo fascista o el Autómata Paquito, una réplica del Caudillo que jamás llegó a utilizarse.
Dejó escritos más de doce volúmenes en los que se detallaban innumerables inventos que, con el tiempo y la desfachatez de muchos, han ido e irán saliendo a la luz para hacer la vida humana mucho más fácil y la del fiel cristiano más prolífica en oración.
" para hacer la vida humana mucho más fácil y la del fiel cristiano más prolífica en oración.". Esta frase es tan redonda que acabará siendo un slogan.
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